IndustriaTelecomunicaciones

El Telégrafo Óptico

Arganda del Rey (Madrid)

La telegrafía óptica es una tecnología desarrollada a finales del Siglo XVIII para transmitir mensajes a grandes distancias. En Arganda del Rey podemos visitar una de las torres que constituían la línea que iba de Madrid a Valencia.

 

La historia de la telegrafía óptica da para muchas entradas en este blog, así que voy a centrarme en cada una de ellas en describir un aspecto concreto de esta tecnología, además de la propia visita. En concreto, en esta entrada hablaremos con más detalle del sistema Mathé, que fue la tecnología que se adoptó en España.

TRANSMISIÓN DE SEÑALES ÓPTICAS

Desde la antigüedad, todos los gobernantes, en especial en periodos de guerras, han necesitado transmitir o recibir información de forma más rápida y eficiente que mediante correo a caballo, o a pie. Para ello se han usado banderas, luces, señales de humo, etc. Es decir, un emisor realiza una señal (p.ej. levantar una bandera de un tipo) y lo ve el receptor (además del resto de la gente), lo cual tiene muchas limitaciones. Podemos establecer códigos con banderas, o luces, y un libro de claves, pero el alcance no va a ser muy grande.

Por supuesto, cuando había guerras, nuestros antepasados ubicaban en montañas y cerros a hombres para enviar señales preestablecidas con las que coordinar los movimientos del ejército. Pero eso no es más que una solución táctica y local para un problema concreto, no un sistema de comunicaciones.

 

Señales de humo de indios americanos (1).
Señales de humo de indios americanos (1).

 

Si de verdad necesitamos transmitir información a grandes distancias, nos harán falta puntos intermedios fijos para vencer los obstáculos (montañas, bosques) y la curvatura de la Tierra. Entonces, todo arreglado:​ cada cierta distancia y que cada torre retransmita el mensaje hasta llegar al destino. Sin embargo, cuando añadimos complejidad a algo suelen aparecer otros problemas:

  • ¿Con qué señales luminosas vamos a transmitir? A priori, lo más lógico sería usar luces, pero las lámparas de aceite o gas no tenían suficiente intensidad.
  • ¿Qué código de señales vamos a utilizar? Lo más sencillo sería asignar a cada letra un número y transmitir números por el telégrafo, pero no es lo más eficiente. Quizá podríamos asignar un número a las palabras más usadas, o tener una tabla de mensajes predefinidos y enviar únicamente esos códigos.
  • ¿Cuántos puntos intermedios y a qué altura tienen que estar los emisores y receptores? Cuantas más estaciones de retransmisión, más tiempo tardarán en llegar los mensajes y más cara nos costará nuestra red de telegrafía.
  • ¿Cómo organizamos a todos los «señaleros» de los puntos intermedios? Si, por ejemplo, un punto intermedio no puede funcionar (p.ej. hay niebla, o el señalero está indispuesto), ¿cómo se lo notificamos al resto? ¿qué ocurre si hay un mensaje prioritario que tiene que llegar rápidamente?
  • ¿Cómo evitamos los errores de transmisión? Seguro que en algún momento alguien se equivoca transmitiendo, o recibiendo el mensaje. ¿Cómo podríamos detectar un fallo?
  • ¿Cómo evitar que un intruso (hacker) escuche o altere los mensajes que se envían (man-in-the-middle), como hizo el Conde de Montecristo en la novela de Dumas)?
  • y, por supuesto, ¿cómo conseguir todo lo anterior con un coste lo más ajustado posible?

 

El hackeo que hizo el Conde de Montecristo para arruinar a su rival ocurrió en una torre como ésta (2)
El hackeo que hizo el Conde de Montecristo para arruinar a su rival ocurrió en una torre como ésta (2)

 

Todos estos retos son a los que se han enfrentado a lo largo de los siglos los que han intentado montar sistemas de transmisión óptica e intentaré ir detallándolos en ésta y otras entradas del blog. Te recomiendo que eches un vistazo a otra entrada de este blog, la del Museo Transmisiones 22.

 

LA TELEGRAFÍA ÓPTICA

La primera propuesta para crear un telégrafo óptico la hizo en 1684 el polifacético científico inglés Robert Hooke (famoso entre los estudiantes de física por la ley de la elasticidad), pero su propuesta no llegó a materializarse. Otro inglés (Richard Lovell Edgeworth) llegó a montar en 1767 un sistema con codificación de mensajes, pero no pasó de ser un divertimento.

 

Sistema experimental de Edgeworth, formado por cuatro indicadores con los que se podían representar hasta 10.000 cifras (3).
Sistema experimental de Edgeworth, formado por cuatro indicadores con los que se podían representar hasta 10.000 cifras (3).

 

La creación de la primera red de telegrafía óptica fue obra del francés Claude Chappé, ayudado por sus hermanos, que en los primeros años de la Revolución Francesa hizo una demostración pública de transmisión de mensajes entre los pueblos de Brûlon y Parcé (ambos cerca de Le Mans), separados por unos 15 Km. En 1792 la Asamblea Legislativa le encargó montar la primera línea de telegrafía entre Paris y Lille, separadas unos 230 Km. La línea tenía 15 torres de retransmisión y permitía enviar un mensaje en media hora.

 

Caseta de telégrafo de Chappé, cuyo mecanismo de transmisión se basaba en la posición relativa de los indicadores (4).
Caseta de telégrafo de Chappé, cuyo mecanismo de transmisión se basaba en la posición relativa de los indicadores (4).

 

Chappé continuó creando nuevas líneas de telegrafía, como la de París a Estrasburgo, que ayudaron enormemente al gobierno revolucionario y al de Napoleón en sus guerras. El segundo país en implantar este sistema de transmisión fue Suecia, por medio del científico y escritor Abraham Edelcrantz, cuyo diseño mejoraba el sistema de Chappé. Edelcrantz instaló en 1794 una línea óptica entre Estocolmo y la residencia de la familia real en Drottningholm y continuó aumentando la red óptica en Suecia, creando el primer enlace internacional en 1800, entre Suecia y Dinamarca.

 

Telégrafo de Edelcrantz, basado en una matriz de indicadores que se activaban o desactivaban (5).
Telégrafo de Edelcrantz, basado en una matriz de indicadores que se activaban o desactivaban (5).

 

En Reino Unido también entró en funcionamiento la primera línea antes de acabar el Siglo XVIII, uniendo Londres y Deal. En pocos años, ya había enlaces de telegrafía óptica en las colonias de Canadá (1800) y la India (1810).

 

LA TELEGRAFÍA ÓPTICA EN ESPAÑA

La historia de la telegrafía óptica en España es la historia de un fracaso (uno de tantos), debido a la situación de inestabilidad en que nos sumieron nuestros gobernantes, políticos y militares. No sólo no desplegamos una red de telegrafía óptica cuando lo hicieron otros países (final del XVIII), sino que la tecnología que acabó con la telegrafía óptica (la telegrafía eléctrica) fue inventada por un español (Francisco Salvá y Campillo) y no supieron darse cuenta de su importancia.

 

Retrato del español Francisco Salvá y Campillo, inventor del telégrafo eléctrico (10).
Retrato del español Francisco Salvá y Campillo, inventor del telégrafo eléctrico (10).

 

A pesar de que ya en 1794 habían llegado a España las noticias del telégrafo de Chappé e incluso se hicieron algunas pruebas en el Observatorio Astronómico de Madrid ese mismo año, fue el ingeniero Agustín de Betancourt quien la introdujo en España. En 1796 viajó a Francia, donde junto a su amigo el relojero suizo Breguet, diseñó un sistema telegráfico mucho más preciso que el de Chappé, que presentó al Directorio de la República en 1797. Se solicitó a la Academia de Ciencias un dictamen sobre las ventajas de este nuevo sistema. El dictamen del tribunal formado, en el que se encontraban nada menos que Coulomb, Lagrange y Laplace fue tremendamente favorable a este diseño, pero la oposición del director de la telegrafía francesa (el propio Chappé) evito que se implantara en Francia.

 

Sello ruso del ingeniero Betancourt, pionero de la telegrafía óptica en España (6).
Sello ruso del ingeniero Betancourt, pionero de la telegrafía óptica en España (6).

 

De vuelta a España, Betancourt consigue que en 1789 Carlos IV apruebe la construcción de una línea entre Madrid y Cádiz, de la que sólo se finalizaría el tramo Madrid – Aranjuez por falta de fondos y que entró en funcionamiento de manera intermitente y casi experimental.

El segundo intento de crear una red de telegrafía óptica tuvo lugar en 1805, cuando el ingeniero militar Francisco Hurtado del Pino construyó en Cádiz una red de telegrafía óptica de uso militar (conocida como el Telégrafo Principal). Esta red, basada en un diseño y codificación propia, tenía como nodo central a Cádiz y de ahí partían líneas a Chiclana, Jerez, Sanlúcar y Medina Sidonia (una red hub-and-spoke) y estuvo en funcionamiento hasta el año 1820, en que se desmanteló.

 

Diseño de telégrafo móvil basado en el sistema de Francisco Hurtado (7).
Diseño de telégrafo móvil basado en el sistema de Francisco Hurtado (7).

 

El tercer intento tuvo como protagonista a otro militar, el marino e inventor Juan José de Lerena y Barry, quien montó una línea entre Madrid y Aranjuez en 1831 (sobre la anterior de Betancourt) y otra entre Madrid y San Ildefonso el año siguiente, que se desmantelarían en 1838. Realmente, el Gobierno de España no llegó a entender la telegrafía óptica, ni su uso y apenas se enviaron unos cientos de mensajes al año a través de estas líneas.

 

Juan José Lerena, marino, conquistador, inventor, que llegó a publicar en Nueva York un libro de enseñanza de español para ingleses, llamado "Spanish Telegraph" (8).
Juan José Lerena, marino, conquistador, inventor, que llegó a publicar en Nueva York un libro de enseñanza de español para ingleses, llamado «Spanish Telegraph» (8).

 

En 1836, el General Manuel de Santa Cruz, montó una línea telegráfica que unía Logroño con Vitoria y Pamplona, para disponer de comunicaciones rápidas durante la Primera Guerra Carlista. El diseño de este telégrafo y su tabla de códigos los hizo el propio general Santa Cruz e incorporaba códigos para las más diversas frases, algunas tan rimbombantes como «no puedo dejar de hacer mención a la bizarría de aquellos…», que se codificaba como 41425233. En los cuatro años que estuvo en funcionamiento (hasta que finalizó la guerra) se transmitieron un total de 2.136 mensajes.

 

Sistema telegráfico usado en la Primera Guerra Carlista (9).
Sistema telegráfico usado en la Primera Guerra Carlista (9).

 

El quinto y definitivo intento de establecer una red de telegrafía óptica tuvo lugar en 1844, cuando el Gobierno encarga a la Dirección de Caminos la construcción de una red telegráfica que una las capitales de provincia. Su director, Manuel Varela, convocó un concurso, cuyo ganador fue el ingeniero militar José María Mathé. En 1848 ya estaba operativa la línea Madrid – Irún, en 1849 la de Valencia y posteriormente llegaría la de Cádiz (1851). El resto de líneas no llegaron a construirse.

 

José María Mathé, creador de la primera red de telegrafía óptica en España (14).
José María Mathé, creador de la primera red de telegrafía óptica en España (14).

 

La red de telegrafía óptica nació muerta. Cuando se diseñó ya se conocía la telegrafía eléctrica y la línea eléctrica Madrid – Irún comenzó a funcionar 6 años después del inicio de su equivalente óptico (1854). En 1857 se desmanteló la última línea de telegrafía óptica nacional, 9 años después de su inicio de operaciones. La telegrafía óptica en Cataluña siguió en funcionamiento hasta finales del S. XIX, con algunas líneas del propio Mathé y otras con diferentes tecnologías, que se usaron durante las dos últimas guerras carlistas.

 

Red Nacional de Telegrafía Óptica (7).
Red Nacional de Telegrafía Óptica (7).

 

A pesar del fracaso de la telegrafía óptica en España, el mérito de Mathé y Varela fue que, sabiendo que este sistema iba a ser sustituido por otra tecnología, centraron sus esfuerzos en crear un cuerpo de telegrafistas (torreros) bien estructurado y formado (la mayoría eran militares licenciados de la Guerra Carlista), que permitió acelerar la introducción del sistema eléctrico en España.

 

Telégrafo eléctrico de Cooke y Wheatstone, el primero comercializado, que acabó con el óptico (11).
Telégrafo eléctrico de Cooke y Wheatstone, el primero comercializado, que acabó con el óptico (11).

 

Por último, como recuerdo de este breve sistema de comunicaciones han quedado por la geografía de España multitud de cerros, torres y promontorios llamados «del telégrafo», porque en ellos se ubicó hace 170 años una torre óptica.

 

EL SISTEMA MATHE

El sistema propuesto por el ingeniero Mathé era muy sencillo y a la vez potente. Estaba formado por los siguientes elementos, que se situaban en lo alto de una torre:

  • Un indicador móvil, que podía subir y bajar, con 13 posiciones (oculto, 0, ….9, X, m), con el que se codificaba el mensaje.
  • Un panel bastidor, en cuyo centro se movía el indicador, con 3 franjas oscuras a cada lado
  • Una bola móvil situada a un lado del bastidor, con 6 posiciones (1 al 6), que servía para la señalización de la transmisión

 

Sistema de Mathé, con un indicador de 13 posiciones y una bola de señalización de 6 (7).
Sistema de Mathé, con un indicador de 13 posiciones y una bola de señalización de 6 (7).

 

La X del indicador significaba error en la recepción y solicitaba el reenvío, mientras que la m anulaba el signo anterior enviado. La ausencia del indicador (oculto) se denominaba arriada ( | ) y servía para separar mensajes y grupos de símbolos.

 

Volante del telégrafo, que el torrero hacía girar para transmitir (12).
Volante del telégrafo, que el torrero hacía girar para transmitir (12).

 

El panel de la torre se podía observar tanto a vanguardia (la torre siguiente en la transmisión) como a retaguardia (la torre anterior).

Todos los mensajes se transmitían cifrados, mediante un libro de claves en poder de los comandantes del servicio, de tal manera que los torreros no podían interpretarlos. A los mensajes se añadía una cabecera en texto claro (interpretable por los torreros) con información de inicio, destino, hora y tamaño del mensaje. La priorización de un mensaje y las características de la línea se transmitían mediante la bola.

 

Vista del interior y exterior de una de las torres de Mathé (12).
Vista del interior y exterior de una de las torres de Mathé (12).

 

Cuando un torrero recibía un mensaje, lo iba anotando en un cuaderno especial pautado, indicando la hora al margen, y lo repetía en su panel, moviendo un volante que hacía subir o bajar el indicador. De esta manera, el torrero a retaguardia recibía confirmación de que se había transmitido bien y el torrero a vanguardia comenzaba a copiarlo, para proseguir la transmisión. Se estimaba que un torrero podía transmitir un símbolo cada 20 segundos (0,2 bps). La transmisión de un mensaje completo a lo largo de una línea podía tardar hasta 3 horas, mientras que los mensajes de vigilancia (keep-alive), mucho más breves y utilizados para asegurarse de que los torreros estaban atentos, tardaban cerca de media hora.

 

Libro de códigos del servicio telegráfico, al que sólo los comandantes tenían acceso (7).
Libro de códigos del servicio telegráfico, al que sólo los comandantes tenían acceso (7).

 

Los mensajes cifrados se agrupaban en grupos de 9 cifras, siendo el último de longitud variable. Un posible mensaje (extraído del libro Historia de la Telegrafía Óptica en España) sería el siguiente:

4|012026|1X102X105114|<mensaje cifrado>

  • 4 – Indica que el mensaje es urgente
  • 012026 – Es un mensaje de la torre 012 a la torre 026
  • 1X10 – Hora de salida del mensaje (11:10), ya que la X repite el carácter anterior aquí
  • 2X – Día de emisión del mensaje (22)
  • 114 – La última cifra indica el tamaño del último grupo de cifras (4), mientras que las anteriores indican el número de grupos. Por lo tanto, el mensaje tiene 9×10 + 4 = 94 cifras

 

Vemos por lo tanto que el sistema óptico ya contaba con multitud de características que podemos ver hoy en los sistemas actuales de transmisión de datos.  El protocolo de comunicaciones de Mathé no fue fijo, sino que se fue modificando durante su corta vida, para hacerse más eficiente y tuvo cierta continuación en los inicios de la telegrafía eléctrica.

 

Una trama Ethernet, como las que usan los computadores actuales, no difiere mucho de los mensajes telegráficos.
Una trama Ethernet, como las que usan los computadores actuales, no difiere mucho de los mensajes telegráficos.

 

LA TORRE DEL TELÉGRAFO ÓPTICO DE ARGANDA

La Torre del Telégrafo Óptico de Arganda está situada en un promontorio al Sudeste de Arganda del Rey, en un paraje conocido como Campillo. Se puede llegar perfectamente en coche, aunque los últimos 100 metros hay que hacerlos andando.

.

 

Esta torre es la cuarta de la línea Madrid – Valencia, tras la central de la Casa de Aduana de Madrid (Parque del Retiro), Cerro Almodóvar (Vallecas) y Rivas. Entró en servicio en 1849 y, como toda la línea, fue abandonada en 1856. En realidad, la línea debería haber llegado hasta La Junquera (Gerona), pero sólo se construyó el tramo a Valencia y algunos tramos en Cataluña aislados.

 

Línea telegráfica Madrid - Valencia (12).
Línea telegráfica Madrid – Valencia (12).

 

En el diseño inicial de la línea, la línea a Valencia sólo contaba con 29 torres, pero hubo que añadir esta adicional de Arganda del Rey entre Perales y Rivas.

Como casi todas las torres de España, su estado era de ruina, aunque aún se conservaba la estructura. En 2005, la Comunidad de Madrid comenzó la restauración de las torres de Arganda y Collado Mediano, inaugurando la primera oficialmente en 2009.

 

Estado de la Torre del Telégrafo de Arganda del Rey antes de su restauración (13).
Estado de la Torre del Telégrafo de Arganda del Rey antes de su restauración (13).

 

La torre, al igual que la mayoría de las de la línea, es de base cuadrada y tiene 3 plantas. Desde el exterior se accedía al primer piso mediante una escalera de madera, que se retiraba una vez que entraba el torrero. La planta baja, en el zócalo tenía funciones de cocina y defensivas y contaba con aspilleras para repeler un posible ataque. La tercera planta era la sala de transmisiones, donde se ubicaban los dos anteojos (uno apuntando a Rivas y el otro a Perales de Tajuña) mediante una abertura en la fachada. Ahí también se ubicaba el volante con el que se subía y bajaba el indicador y la mesa con el libro de operaciones, donde el torrero tenía que apuntar todos los mensajes recibidos. Por último, el telégrafo se ubicaba en la cubierta, que era plana con forjado de madera.

 

 

El interior de la torre ha sido restaurado, incluyendo los instrumentos propios del telegrafista, como los anteojos, el cuaderno del volante y armas. La escalera al interior de la torre se ha puesto fija, pero el acceso está cerrado y sólo se puede visitar el interior en visitas guiadas. Desgraciadamente, el Ayuntamiento no facilita este tipo de visitas, salvo a escolares y asociaciones vecinales. De hecho, ni siquiera en la web de turismo de Arganda se menciona el telégrafo óptico.

 

Anteojos, con silla y mesa para apuntar, y volante para mover el indicador (12).
Anteojos, con silla y mesa para apuntar, y volante para mover el indicador (12).

 

En el exterior de la torre se ha instalado un panel explicativo del funcionamiento del telégrafo y dos telégrafos ópticos, separados unos 100 metros, con los que se pueden enviar mensajes entre ambos (juego del telégrafo, lo han llamado), orientado a las visitas escolares.

 

 

Para finalizar la visita, también desde el exterior podemos mirar en dirección a la antigua torre de Rivas (destruida, pero cuya ubicación conserva el nombre de Cerro del Telégrafo) y hacia Perales de Tajuña (en estado ruinoso y cuya vista la tapa una cementera).

 

 

¡ QUIERO SABER MÁS !

Si quieres aprender más sobre la telegrafía óptica en España puedes consultar lo siguiente:

  1. Hay varios artículos introductorios, como Microsiervos, LowTechnMagazin y, mucho más extenso, ALTorres.
  2. El libro «Las Telecomunicaciones en España. Del telégrafo óptico a la sociedad de la información» se puede comprar por tan sólo 0,09€ en La Casa del Libro y es también de carácter introductorio.
  3. El libro de Sebastián Olivé «Historia de la Telegrafía Óptica en España» es una obra excelente, ya que cuenta con detalle el sistema de codificación, el funcionamiento de las líneas y los aspectos socio-laborales de los torreros.
  4. Para entender a fondo la red de telegrafía óptica en España tienes disponible en la web del Ministerio de Cultura el excelente estudio de Capdevila y Slepoy «Estudio de la Red de Telegrafía Óptica en España«, que incluye fichas de todas las torres y su estado actual.
  5. Por último, el proceso de restauración de la torre de Arganda lo puedes consultar en la web de la Comunidad de Madrid.

 

IMÁGENES

Todas las fotografías han sido tomadas por el autor de este blog, excepto las siguientes:

(1) – De Frederic Remington – artchive.com, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=3318312
(2) – Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=3266940
(3) – By John Farey, Jr. – Rees&#039;s Cyclopædia, Plates Vol. IV, &quot;TELEGRAPH&quot;, Fig. 1 and 2; from a digital scan at https://archive.org/details/cyclopaediaplates04rees, Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=24409136
(4) – By Romain Bréget – Own work, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=22981492
(5) – By CBX – Own work, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=1550374
(6) – De Processed by Michael Romanov – Marka / Издательско-торговый Центр &quot;Марка&quot;, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=3518819
(7) – Imagen del libro de Sebastián Olivé «Historia de la Telegrafía Óptica en España«
(8) – De Eulogia Merle – Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, CC BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=37026507
(9) – http://www.altorres.synology.me/index2_transmisiones.htm
(10) – De José María Marqués y García – http://ramc.cat/aw-team-member/salva-i-campillo-francesc/, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=89209215
(11) – By Geni – Photo by User:geni, CC BY-SA 4.0, https://en.wikipedia.org/wiki/Telegraphy#/media/File:Cooke_and_Wheatstone_electric_telegraph.jpg
(12) – Ayuntamiento de Arganda.
(13) – Dossier restauración Torres de Arganda y Collado Mediano
(14) – De La Ilustración Española y Americana-Biblioteca Nacional de España – http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0001086117&amp;page=4&amp;search=&amp;lang=es, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=69685165

 

 


(c) – Guía del Turista Friki – Miguel del Pino – 2020

2 comentarios en «El Telégrafo Óptico»

Déjanos algún comentario

A %d blogueros les gusta esto: